«Mi madre siempre me decía que había que recitarle a la luna cuando estuviera llena» El Observatorio Astronómico Nacional de Noruega es el sueño de cualquier estudiante de Astronomía: los mejores telescopios, la noche más bonita de Europa... Pero lo que nunca imaginaría es que, en medio de mis prácticas, descubriría algo que nadie había imaginado. La luna era mucho más que un satélite. Los cuentos de mamá ahora tenían sentido. Y yo tenía que tomar la decisión más complicada de mi carrera.