-Bueno linda, ya te lo dije : algun dia serás mia y lo mas gracioso es que me vas a rogar porque así sea- dijo él con su típica mirada sensual que hacía que a todas las chicas se le suelten las bragas, hasta a mi, no me mal interpreten, pero realmente se apreciar un hombre cuando es guapo, lo que odio y no tolero es su arrogancia y altanería, así precisamente es Taylor Dennovan un egocéntrico hijo de su mami que le importa un bledo pasar por sobre la gente, pero conmigo eso no sucederá, uno porque no me dejaré y dos porque no hay que tener menos de tres dedos de frente para darte cuenta que el amor no existe, lo miré -Solo tengo una cosa que decirte - respiré profundamente-Vete a la mierda, maldito mujeriego- levante mi dedo corazón, a lo que este imbecil causó gracia, di media vuelta y me fui, no sin antes decir - a comezado la guerra querida-.