Ahogada.

El ocaso se fundía con el color siena tostado de aquellas hojas, sin siquiera tener percepción de ello el momento ocurrió. Ese en el que todo se detiene, Rain se permitió fluir en dicha tarde lluviosa.
Al fin se había silenciado el monstruo, el complejo del costal se había marchado junto a la culpa. Estaba sola y por primera vez le agradó.

《¿Qué queda de mí cuando ya lo di todo? ¿Es mi reflejo roto? ¿Las heridas que me consumen y nadie nota? ¿Es el monstruo gritando?》