Kazutora Hanemiya, un chico destinado a estar hundido en soledad. En una fría noche, incluso después de años recordando a la persona que, en algún momento, le salvó su miserable vida; visitando sin falta al amigo de este en la cárcel, con remordimiento por no haberlo hecho mejor, por no haber evitado este acontecimiento y por una promesa unilateral que hizo sin razón alguna o eso es lo que quería pensar al encontrarse en un bucle de los mismos cinco momentos.