Yoshikage Kira es un hombre blanco, rubio, de mirada viólacea muy ajena a todos los privilegios que su sola figura representa.
Es en este escrito donde él resume sus vivencias a la par de su primer grupo de amigos leal y fiel, integrado por hombres y mujeres disidentes del género binario y de los estereotipos blancos, en un barrio marginal y abandonado por la sociedad.
A la par de esta gente, la cual con sus solas memorias logran enseñarle muchísimas cosas sobre la vida que él jamás podría haber imaginado, Yoshikage Kira es capaz de vislumbrar por primera vez al enigmático esbozo del amor en una persona que tampoco, jamás, podría haber imaginado como tal. Ve, en esa persona tan distinta a él, algo tan ácido como lo puede ser el inexplicable sentimiento del amor sincero, un amor que hiere: Y sobretodo, un amor que los debilita.
Entre las oscuras habitaciones iluminadas por cutres carteles neón del teibol, suelen llamarlo "La diabla carmesí". Pero sus amigos y sus amigas, suelen llamarle Diavolo.
Descripción no tan pretenciosa: Kiraboss pero muy, muy marginal. Kira es un oficinista blanco del montón y Diavolo una teibolera de barrio. Fin.