«Y cuando alcé mi vista, el gato que velaba por mi bienestar estaba justo ahí para mí, en medio de las sombras».
Narrar hechos es difícil, pero ¿Narrar hechos con los que los jóvenes puedan sentirse identificados? Más aún.
La vida adolescente no es la más fácil, mucho menos si la sientes solitaria, pero siempre hay un "algo" que saca tu mente a flote, y por eso, te guía.
¿Tendremos un final feliz... O uno real?
La vida es compleja, así hay que decirlo, sin tapujos, porque todos sabemos que en alguna ocasión, así fuera de nuestra juventud, nos pasó por la mente un "¿Y si...?" pero de esos "¿Y si... Yo no estuviera?" o variantes de ese mismo.
¿Te soprendería saber que en realidad, tus problemas, aunque sea en algo mínimo, se parecen a los de alguien más? Y no, no digo eso por minimizarlo, porque minimizar eso es como decir que el problema no existe y simplemente está ahí, más latente que nunca.
Aprender de uno mismo, aprender a aceptar ayuda y aprender a encontrar un camino, eso quiero que encuentren en ésta historia con una protagonista anónima.
***
No se permiten adaptaciones, copias o cualquier medio de plagio de ningún tipo.
Historia de mi autoría en proceso de ser registrada bajo mis totales y legales derechos de autor(a).
Cada mente es un mundo distinto, deja fluir tus emociones y plasma tu mundo en tus ideas, no copies, no hagas plagio, porque no sería tuyo, y en el fondo lo sabrías.
Inicio (según recuerdo) 19/10/21.