Greys es una chica que obtiene todo por tener mucho dinero, o mejor dicho ser ultra millonaria, tiene todo lo que ella desea: tiene carro, y "un novio perfecto" el cual es un deportista millonario, que en realidad es la representación exacta de un patán pero que no deja por la buena imagen y popularidad que le da.
Toda esta burbuja de vida que simula perfección cambia con la aparición de un nuevo chico, Dayron, un hombre que la desespera, y el cual no puede controlar porque el no es para nada apariencias sino realidad, un tipo que le muestra lo que en realidad es la felicidad y que solo le provoca confusión al no saber si lo ama o lo odia.
Dayron una persona solitaria sin necesidad de aparentar algo para ser parte de un grupo, solo se preocupa por sus estudios y vive una vida tranquila y sin lujos a lado de su pequeña familia estructurada por su hermana y él.
Dayron y su hermana se han cuidado mutuamente desde muy niños; ella de ocho años y el de cinco, han sufrido mucho,sus papá los dejaron sin una razón alguna, pero eso los hizo más fuertes y les enseñó el sentido de la vida y el valor de la familia sin importar su tamaño.
Greys piensa que es como el montón y al ser nuevo, una presa facil por lo que quiere aprovecharse, imponer su control, pero veremos quien controla a quien.
"Caí de la manera menos esperada, y por el hombre que nunca imaginé pero que volvería amar y buscar ahora y en mis mil vidas"
Abbie tiene un problema y la solución está en la puerta de al lado.
¡Ella no ha hecho nada malo! Sin embargo, su excompañera de hermandad la ha puesto en un aprieto en donde su futuro universitario pende de un hilo.
Con el tiempo corriendo, pánico y una mejor amiga experta en dar soluciones, Abbie explora las opciones, pero no tarda en darse cuenta de que Damiano, el frío jugador de hockey y su ceñudo compañero de piso, es la respuesta.