Emily Berlim, en pocas palabras, es una chica sumamente dañada. ¿Por qué? Por tener esperanzas en el amor, en la humanidad, y en el estupido de su ex novio.
Después de un desagradable acontecimiento Emily entiende lo que es la vida y aunque lenta y tortuosamente empieza a madurar, a cambiar y a entender que en la vida no todo puede ser color rosa. Y a esa lista de negro la encabeza el amor.
-Dime que no me amas y te dejaré en paz. Dime que no me piensas, que no me quieres cerca... Pero luego atente a las consecuencias cuando ya no me veas.
Su corazón gritaba que se quedara, su cabeza pedía que reaccionara y ella, tontamente, dejó que se alejara. Haciendo así que la poca esperanza que le quedaba se esfumara.