Nuevamente la maldad lograba separar a Louis y a Harry. Pero la verdad era, que sin importar el tiempo que transcurriera, ni el miedo, o el dolor por la separación; No existía nada que pudiera menguar su amor. La vida y el destino funcionan a veces de maneras muy extrañas, pero siempre se encargan de poner todo en su lugar. Y sin duda el lugar de Harry era en los brazos de Louis. Todo cae por su propio peso, y nada puede vencer al amor cuando es sincero.All Rights Reserved