Cuántas veces había venido a esta playa y siempre veía el mar y a los niños jugar con la arena... Cuántas veces trate de hacer un castillo y este terminaba por caerse o ser comido por el mar. Mis lágrimas salen sin detenerse y sin querer parar... Mis recuerdos siempre hacen que ellas salgan y se pierdan entre la arena y el mar.