Me tomó del brazo y me arrastró hacia uno de los callejones sin salida de mi barrio, eran las 11:20 PM según mi reloj, un hombre alto me estaba arrastrando hacia un callejón, parecía irreal que nadie apareciera, no había absolutamente nadie en la calle, mi corazón latía mucho más rápido de lo normal, el hombre vestía ropa negra de pies a cabeza, mis piernas empezaron a temblar pero el hombre no me soltaba para nada, entonces me empujó contra la pared y me acorraló ahí. Tenía mis ojos cerrados y temblaba a no más poder, sentí su perfume y entonces me atreví a mirarlo pero fue lo peor que hice, el respiraba agitado y sus ojos parecían brillar en la tenue luz que nos alumbraba, sus labios bastantes grandes y carnosos, su cabello le caía por la cara, mis manos actuaron por si solas y hasta mi cuerpo parecía actuar solo...