El Dr. Daniel Rodríguez es el nuevo médico de Centro Médico de Cherry Hill. Es alto, joven e increíblemente atractivo... pero también es un médico muy ético. Y odia a los que rompen las reglas. El problema está cuando él es el primero en romperlas.
Entra en su consulta, Claire Ross, una chica con un pasado turbio y que nunca teme saltarse las normas, porque vive la vida de forma pautada y controlada.
Cuando los dos se encuentran van a saltar chispas desde el estetoscopio hasta la camilla.
Pero Daniel camina con delicadeza en territorio sensible, tomándose en serio la posibilidad de que la simple atracción resulte ser algo más serio.
Por otro lado, tenemos a Claire, que toma un rumbo diferente al del doctor playboy: en lugar de un mujeriego empedernido, ella prefiere centrarse en su trabajo y, además, la atormentan los recuerdos del pasado y está recelosa de abrir su corazón a cualquier tipo de contacto.
Inicialmente cautelosa, recordando con demasiada facilidad lo que perdió, no puede alejarse del hecho de que el doctor le despierta sensaciones novedosas y intensas.
En esta novela vamos a ver como ambos hacen girar un romance de amor y odio al borde de su asiento que siempre se siente como si estuviera colgando del filo de una navaja entre el desastre y el amor verdadero. La química es palpable.
Una de las cosas que hace que los médicos sean tan ardientes intereses amorosos masculinos es lo inaccesibles que son, lo emocionalmente inaccesibles que son. Abrumados por las preocupaciones de la vida o la muerte, están esencialmente casados con sus trabajos. Las mujeres que los aman con justicia temen quemarse, diciéndose a sí mismas que no se enamoren cuando apenas pueden ayudarse a sí mismas, o eso nos dicen los clichés.
Y, sin embargo, de alguna manera, este apuesto médico multimillonario se ha interesado románticamente por ella.
John Anderson es uno de los hombres más poderosos y multimillonarios del mundo.
La riqueza de su familia no ha hecho más, que aumentar generación tras generación.
Ha nacido en cuna de oro, ha tenido la mejor educación y las más costosas posesiones.
Lujos por los que hombres y mujeres venden su alma al diablo.
Sin embargo, lo que para unos es una bendición, para otros, es una maldición.
Tal es el caso de John, quien creyó haber encontrado el amor de su vida, y los amigos más fieles, no obstante, todo cambia cuando acepta el engaño propuesto por su abuelo.
Ahora con su mundo cayendo a pedazos, está dispuesto a encontrar a su verdadero amor tras una pequeña mentira.