The princess and the demon witch

Una guerra cegó su corazón, arrebató lo único importante para un demonio, su amor y más grande anhelo.
Su compañera, su maestra, su emperatriz.

Lan-Sui buscó durante tres primaveras, entre nieve y flores, entre mortales e inmortales, buscó y buscó una vez más. Rosas corruptas crecieron como falta a su palabra, sombras oscuras de dolor y miseria situaron sus ojos, al final solo la luz de un basto azul pudo dispersarlas.

La perdió dos veces, y ya no estaba dispuesta a cometer el mismo error.

Dos vidas y un secreto.

Un corazón helado y las llamas azules de la pasión. Ella era hielo, su compañera temía al fuego pero era el equivalente a una antorcha.