El 5 de septiembre de 1946 nació en la colonia británica de la isla de Zanzíbar quien fue el vocalista de una de las más afamadas bandas de rock. La voz la ponía Farrokh Bulsara, más conocido como Freddie Mercury, y al conjunto lo llamaron Queen. Freddie Mercury. Su vida contada por él mismo, nos conduce por el recorrido de uno de los grupos más emblemáticos del último tercio del siglo XX. Incitados por un casi incontrolable, ambicioso y directo Mercury, Queen lograron el éxito, y se convirtieron en la banda más grande de la generación de los setenta en adelante. La historia, contada por él mismo, muestra cómo en muchas ocasiones el grupo estuvo a punto de separarse, pero siempre permaneció unido gracias a su afán por romper con las barreras musicales establecidas. Freddie Mercury, hombre de pocas palabras, nos transmite, a través de sus entrevistas -muchas de ellas inéditas hasta ahora- mucho más que lo que nos puede ofrecer una biografía al uso. No hay mejor retrato que el que muestran sus propias palabras.
Por eso, en este libro, él mismo habla sin tapujos sobre los duros comienzos del grupo, los problemas con la prensa, la presión de las giras, las disputas internas de la banda o su agitada vida personal (y sexual).
Freddie Mercury. Su vida contada por él mismo, es un compendio de declaraciones de Freddie a partir de entrevistas realizadas a lo largo de veinte años. Un retrato agridulce y a veces contradictorio, de uno de los iconos de la historia del rock.
-No llores angel, ¿Quien te ha hecho tanto daño? -dice desde la sombras, la luz se ha apagado con el llanto del ángel.
-Aquel demonio -señala limpiando sus lágrimas-. Lo siento, debí tener más cuidado.
-El es quien debería tener más cuidado.
La sonrisa del diablo se ensancha, sabe que no hay nada que pueda impedir que lo haga sufrir, que torture a quien daño el ala de su ángel, quien astillo su dulce corazón.
No hagas llorar al ángel, no querrás obligar al diablo a salir del averno para ver la sonrisa de aquel angel que lo atormenta en sus sueños.
No querrán ver cómo los hace sufrir por separarlo de quién mantenía con luz el averno, que mantenía en cautiverio a la bestia.
El destino nos depara cosas inciertas, el camino puede ser largo y espinazo. Ten cuidado cuando hagas tropezar al ángel que te sigue y lo hagas llorar no querrás ver la venganza que tiene el diablo preparada para ti.