Emma no para de tener pesadillas, cada noche sus hermanos muertos vuelven en sus sueños y ella no puede hacer nada para salvarlos. Pero lo que le daba más miedo, era perder a Ray, el siempre desaparecia y la dejaba sola, ella se despertaba cada madrugada con lagrimas en los ojos y luego finjia ante sus hermanos que todo estaba bien.