Una esposa para el griego y un padre mis hijos

Clark Strobl es un multimillonario griego. A sus 30 años, jamás se habia enamorado, nunca habia tenido una relación estable hasta que conoció a Mila. Una rubia de piernas interminables, grandes ojos grises y labios carnosos. Que conoció en una cena benéfica presentada por uno de sus amigos.
Al menos eso creyó él hasta que se dio cuenta que ambos lo único que deseaban era blanquear su cuenta de Banco.
Sacarle todo el dinero, robarle.
Tarde se dio cuenta, cuando preparó una sorpresa donde le pediría que fuera su esposa.
Su madre estaba a punto de morir por un cáncer terminal y lo único que deseaba era complacerla. Darle la oportunidad de verlo casado antes de ya morir, antes de partir de este mundo.
Y más aún cuando su madre le comentó que el testamento de su abuela había sido leído y su única voluntad para que él, como hijo único y Nieto único, cobrará la herencia es Q se comprometiera y casara antes de los 32 años.
Pero Clark necesitaba una esposa.
Una que no le importara en lo absoluto.
Susana Prescott es una norteamericana con dos hijos. Viuda desde hace dos años, quedó en la calle, pues tuvo que pagar todo lo que tenía para saldar la deuda que le dejó su esposo moribundo.
Ahora no tenía nada, ni siquiera para darle alimento a sus hijos. Aún así, seguía manteniendo su postura de no pedirle ayuda a sus padres, los cuales tenían el dinero suficiente para darle un buen porvenir a sus hijos.
Pero estos la repudiaron cuando ella quedó embarazada de gemelos.
Si ellos no le ayudaron en aquel entonces, ella por orgullo no iría a su casa a pedirle nada. Ahora, 5 años después.
Prefería mil veces aceptar la propuesta de este griego extraño que llegó un día a la peluquería donde trabajaba.
Casarse por amor lo había hecho.
Casarse por dinero, estaba por verse.
Tan solo esperaba que los ojos azules, el cabello Rubio y el dinero de Clark no le cambiara el pensar.
El hombre parecía un modelo sacado de una revista y ella tenía demasia