La humanidad sólo pensaba en saciar esa sed de sabiduría y poder, en llenar esas ganas de jugar a ser Dioses. Pero nunca es suficiente para los humanos, ellos siempre necesitan más, más y más. Son seres que solo se sienten completos cuando el caos y la destrucción termina consumiendo todo lo que hacen, sin pensar en las consecuencias. Sin ver que dañan a otros, solo por su curiosidad y en algunos casos, su ineptitud. Así como afectaron a los seres que más respetaban, hasta que sucedió todo.