Jaune Arc quería mucho en la vida.
Él quería ser un héroe, quería continuar el legado de sus ancestros, quería enorgullecer a su familia, quería tener una buena vida, quería tener novia, quería tener increíbles aventuras, quería viajar por el mundo y salvar a las personas, quería ser recordado como una leyenda...
Sin embargo, nada de esto sería posible. ¿Por qué, preguntas...?
Pues, Jaune Arc había muerto.
Fue durante la caída de Beacon. Todo paso muy rápido, el dragón, la bruja de fuego, Grimm, Colmillo Blanco, droides pirateados, plumas negras, todo un caos se había desatado, y antes de saberlo, sus amigos habían muerto, cada uno por una mano y de manera distinta.
Él fue el último, quemado hasta la muerte por la misma mujer que había desencadenado todo.
Ahora, Jaune Arc ya no quería nada de lo mencionado antes.
El quería a su equipo de vuelta, a sus amigos; quería que todo volviera a como era antes, quería que nada de eso fuera real, quería que todo fuese un sueño.
Jaune Arc quería vivir.
Pero él no era el único que quería algo.
Los hermanos Romulo y Remo querían diversión, entretenimiento, una manera de quitarse el aburrimiento. Así que, al encontrar a un humano que aunque no cometió ningún pecado demasiado grande llego al infierno, decidieron tirar los dados, y hacerle una pequeña broma al confundido humano que solo quería su vida devuelta.
Lo que no esperaban, es que el patético humano seria su mayor fuente de entretenimiento en mucho tiempo.
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Advertencia: esta obra puede ser en ocasiones muy gráfica, con gore en ocasiones exagerado. Si eres sensible a este tipo contenido, te recomiendo que no
(Fanfic Kwon Jae-sung)
𝐏𝐨𝐫 𝐚𝐥𝐠𝐮𝐧𝐚 𝐞𝐱𝐭𝐫𝐚𝐧̃𝐚 𝐫𝐚𝐳𝐨́𝐧, 𝐬𝐢𝐞𝐦𝐩𝐫𝐞 𝐜𝐨𝐧𝐜𝐞𝐦𝐨𝐬 𝐚 𝐚𝐥𝐠𝐮𝐢𝐞𝐧 𝐪𝐮𝐞 𝐚𝐜𝐚𝐛𝐚 𝐬𝐢𝐞𝐧𝐝𝐨 𝐧𝐮𝐞𝐬𝐭𝐫𝐚 𝐝𝐞𝐛𝐢𝐥𝐢𝐝𝐚𝐝. 𝐍𝐨 𝐢𝐦𝐩𝐨𝐫𝐭𝐚 𝐜𝐮𝐚́𝐧 𝐝𝐮𝐫𝐨𝐬 𝐬𝐞𝐚𝐦𝐨𝐬, 𝐜𝐮𝐚́𝐧 𝐟𝐮𝐞𝐫𝐭𝐞 𝐢𝐧𝐭𝐞𝐧𝐭𝐞𝐦𝐨𝐬 𝐬𝐞𝐫. 𝐄𝐬𝐭𝐚 𝐩𝐞𝐫𝐬𝐨𝐧𝐚 𝐯𝐢𝐞𝐧𝐞 𝐩𝐚𝐫𝐚 𝐝𝐞𝐬𝐦𝐨𝐫𝐨𝐧𝐚𝐫𝐥𝐨 𝐭𝐨𝐝𝐨, 𝐩𝐚𝐫𝐚 𝐝𝐞𝐣𝐚𝐫𝐧𝐨𝐬 𝐮𝐧𝐚 𝐡𝐮𝐞𝐥𝐥𝐚 𝐢𝐦𝐛𝐨𝐫𝐫𝐚𝐛𝐥𝐞 𝐞𝐧 𝐥𝐚 𝐯𝐢𝐝𝐚.
- 𝐄𝐝𝐰𝐢𝐧 𝐕𝐞𝐫𝐠𝐚𝐫𝐚 -
Los personajes de Cobra Kai no me pertenecen. El único que es de mi autoría es Park Min-ji y su padre.