¿Una princesa occidental casada con un príncipe oriental? -Mi nombre es Regina Sacrorum... -La espada del príncipe estaba casi pegada a su blandido cuello - Yo seré tu esposa. -No hay forma de que ame a una mujer occidental- Sus ojos agudos, orgullosos penetraron su corazón y la carne le tembló ante esa extraña belleza y se negó. Un orgulloso príncipe no aceptaría tal ofensa. Solo que ella ardía como el sol. -Entonces ¿Apostemos? Si te enamoras de mi tendrás que dejarme ir y si yo me enamoro de ti...entonces podrás tomar mi vida.