Gris como el cielo: azul tus ojos

Tras su sarcasmo, Noah esconde el miedo profundo de que los demás se enteren de su condición, que sólo le permite ver el mundo en negro, blanco y sus tonalidades.

Pero entonces llega a su vida Nicole, un chico quien promete llenarla de colores. Al mismo tiempo de su llegada, Noah comienza a recibir cartas extrañas, marcando el inicio de unos meses llenos de conflictos.

Ella recibe cartas grises.
Él se las envía a color.
No son cartas de amor, solo notas por si alguna vez él existe en Noah, porque ella ya existe en su mundo.