27 Partes Concluida La vida de Bruce Hunter es tan perfecta, fría y calculada como todo el dinero que hay en su cuenta corriente.
Dueño por herencia tras la muerte de su joven padre, de una empresa de construcción.
Soltero de oro, codiciado como nadie, perseguido hasta la saciedad por la prensa tras el éxito de sus dos últimas novelas.
Bruce Hunter es un hombre apático, aburrido del éxito sin esfuerzo, cansado de no tener tiempo de desear algo lo suficiente, como para que se le pueda considerar deseo.
Tiene noches solitarias y noches en compañía, pero no encuentra la diferencia entre unas y otras.
Hablar con su gato es lo que más humano le hace sentir, salir a correr por las mañanas es una rutina antes del desayuno, la ducha antes del traje de chaqueta, es la última llamada de la libertad.
Todos los días su teléfono suena, al menos tres veces, cada hora.
Todos los días responde con pesadez, al menos tres veces, cada hora.
Bruce ya está cansado de los amigos, de los negocios, de la soledad eterna a la que le condenó el dinero, de las mujeres, del alcohol y de los días lluviosos sentado en un sofá demasiado grande para él solo.