Paso tanto tiempo, seguí sin superar todo lo que había pasado, no había olvido cada beso, cada abrazo, cada sonrisa, todo, absolutamente todo seguía demasiado presente. Los sentimientos seguían creciendo, jamás deshaciéndose o disminuyéndose, me enojaba conmigo misma, por seguir queriéndolo, por cada día que pasaba, por cada mes, cada maldito año. No sabía cómo desahogar ese amor y nunca fue una opción contarle a mi amiga, porque me regañaría, así que tomé el celular, entre a notas y escribí cada sentimiento que sentía, desde que todo inició.
¿Cuánto esta bien entregarle al otro? ¿Con cuanto alguien se siente satisfecho?
Dinero, fama, éxito..
O tal vez... ¿nuestra propia vida?
Fiorella se perdió por darle todo a Patrick,
Patrick perdio a Fiorrella por quererlo todo..