En el momento que puso los ojos en el supo que estaba perdido, su misión se había ido al caño. No lograba entender porque ahora que estaba a punto de triunfar y adueñarse del mundo tenía que aparecer el. Es Capitán Hydra alfa de alfas no podía dejarse llevar de sentimentalismos que no dejaban de ser debilidades, las cuales el no quería ni podía poseer; pero ya era tarde el y su lobo habían caído ante esos ojos preciosos que lo miraban con un atisbo de seguridad y miedo mal disimulado. Aún que Steven no sabía cuál de los dos tenía más miedo si el Omega de preciosos ojos cafés o el, que tenía en estos momentos los sentimientos a flor de piel y el cerebro vuelto papilla. Estaba jodido.All Rights Reserved