¿Recuerdas la lista que hice para definirme hace un tiempo atrás? ¡Ja! Creo que ya no puedo definirme de la misma forma. Claro, estoy segura que ya no imaginas un océano o un brillante cielo cuando escuchas la palabra ‹‹Azul›› ¿A qué no?, Pero tampoco puedo decirte que imaginar a la chica escritora que entró a su banda favorita y que terminó llevando en su cabello el color que tiene por nombre, sea la respuesta correcta, lamento decepcionarte si esa fue tu impresión, ¡Mis disculpas!
Sí, sigo escribiendo, de lo contrario no estarías leyendo esto. Mi cabello ciertamente ya no es azul y tampoco es del largo que solía llevarlo. Mis mañanas ya no se desenvuelven en la calurosa ciudad de Los Ángeles y tampoco soy quien se sienta detrás de un micrófono para grabar el próximo gran éxito, bueno, eso es debatible. Sí, aún tengo una asistente, una cuenta bancaria que no deja de sorprenderme y la música sigue presente.
Ya, ya sé cuáles son las respuestas que quieres, pero para ello debes ser paciente. Muchas cosas cambiaron desde ese marzo del 2020, ¿Cómo no hacerlo? Si pasaron dos años desde que mi corazón se rompió y dejé atrás la vida que tenía como la tecladista y vocalista de The Rejects, la banda más famosa de la década... o eso creen las personas.
Entonces, ¿Estás dentro? Prometo que todavía hay música y mucho más por contar.
Es necesario haber leído AZUL: Entre Letras Y Canciones.
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