Wang Yibo era conocido principalmente por ser un hombre sin piedad, alguien que mataba a sangre fría y hacia sufrir a todo aquel que intentaba desafiarlo. Siendo un mafioso exageradamente millonario y con muchas influencias sabía que existía muchos que le deseaban el mal lo que no se imaginó es que viniera de su propia gente, unas escorias que se atrevieron a destruir toda su propiedad y pintaron con sangre todas sus paredes. Unas horas. Jodidamente en sólo unas horas entraron robando todas sus pertenencias, mataron a cada uno de sus hombres. Y secuestraron a la única persona que lograba alegrarle sus malditos dias. Por lo que ahora él no se detendrá hasta partir el cuello de todos aquellos que le pusieron una mano encima. Pagaran con su propia sangre. Yibo no descansará hasta volver a tener a Xiao Zhan en sus brazos.