Las almas son eternas. Los cuerpos, momentáneos. Vell Starreid lo sabía muy bien, aunque era la perfecta excepción. ·•♥•· La Bruja de Corazones vive puramente de ella y corazones de presas masculinas, hasta que encuentra a su antigua enemiga dentro del cuerpo una ingenua y amigable muchacha. No dejará que una simple amistad intervenga en su objetivo de obtener venganza de su destino actual. ·•♥•· Esta historia me pertenece completamente, y está prohibida su distribución sin permiso.