Varun Khan ya no sentía la emoción del riesgo ni del dinero que se jugaba en las mesas del casino. En realidad, aquello lo aburría. Hasta que una noche ganó más de lo que había apostado, y su premio fue la impresionante Alia Bhatt. Tal vez ella no estuviera en su mejor racha, pero no necesitaba que la rescatara un jugador impenitente e inconformista como Varun. De repente, se veía atrapada con él y no sabía si odiarlo o amarlo. Sin embargo, como estaban cortados por el mismo patrón, jugar con Varun a su propio juego era lo más divertido que había hecho en su vida