Esta es una traducción del libro de Michael Moynihan y Didrik Søderlind. "En europa, el Heavy Metal siempre ha mantenido un cierto nivel de popularidad. A pesar de su estatus de paria a los ojos del público. En el extremo norte de ese continente, la naturaleza fundida del Metal extremo se encontró con los climas helados de Noruega y Suecia, y el resultado fue una creación de proporciones explosivamente volátiles: Black Metal. El norte, rígidamente controlado por los elementos naturales, sus estaciones dominadas por la oscuridad y el frío, irónicamente proporcionó el ambiente desolado which que encendería el Black Metal para ordenar sus fuerzas y reunir armas en una próxima guerra impía. El Rock and Roll ha sido durante mucho tiempo un adversario para muchos de los principios básicos del cristianismo, pero el Heavy Metal subterráneo llevó esto a su máximo nivel. El cristianismo no iba a ser erosionado lentamente a través de incursiones constantes de aumento de la inmoralidad, sino que debía ser desarraigado e incinerado hasta su mismo aliento. El Black Metal proporcionaría a los soldados de pie listos para lanzarse de cabeza a la batalla, con los fuegos artificiales en la mano para incendiar descaradamente las catedrales e iglesias de europa."
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