Si me hubiesen dicho que mi vida terminaría de esta manera... preferiría no haber nacido. toc-toc. El golpe de un puño a una puerta hizo que por acto de reflejo dejará mi diario bajo las almohadas... -hija-. La voz de mi madre apenas era audible, comencé a llorar, después de todo yo era la única culpable. Pero obviamente eso estará a criterio de cada uno de ustedes. ¿Son mis actos lo que condenaron mi vida a tal sufrimiento? ¿ Es el llamado destino quien se burla de mi? Quizá solo soy una víctima más de esta gran carrera a contra reloj que llamamos vida. antes de armar cualquier conclusión déjenme contarles un poquito de mi historia...