Anna, una chica noruega que un frío día de diciembre pierde a sus ambos progenitores. Tras la muerte de sus padres cae en una gran depresión, convirtiéndose en una chica fría y borde, responsable y ceñida a la rutina. Un día decide mudarse a Madrid, ciudad de donde era procedente su madre. Un día Rubén Doblás se cruza por sus narices. Un chico alocado e infantil, que logra darle un giro completo de trescientos sesenta grados a su vida, demostrándole que aún le queda un motivo por el que vivir. El amor.