La mayoría de las personas le entregan su corazón a un algo, un propósito, un sueño o incluso una persona. Algunos entregan su corazón a un deporte, instrumento, vocación, amor y sin darse su cuenta su corazón se convierte en ese o parte de ese algo. Mi corazón, alguna vez fue un libro en blanco, con el tiempo ha sido arrugada, roto en muchos pedazos y muchas partes de este se han perdido. Mi corazón era un libro en blanco, en el que escribí mis pensamientos e historias locas y al pasar el tiempo lo he llenado de recuerdos, algunos muy malos y otras quizás buenos. Y ahora contaré aquellas historias que en algún momento invadieron mi mente, pero nunca fueron talladas en papel.
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