Lo que fue amor, ahí quedó...
El amor es algo magnifico que se les da a los seres humanos, ¿La vida era dura? No, la respuesta era sencilla, el ser humano no utilizaba su vida en ser feliz, y si fuera el caso; su vida ya estaba contada. Las oportunidades siempre fueron dadas, los humanos siempre desconocen la manera de beneficiarse de las oportunidades, pero, conocían la manera de destruir a las personas; es parte de su naturaleza.
Cuándo un vinculo se forma, es tan difícil fortalecer y tan simple de fracturar. Los seres humanos son destructivos por naturaleza propia, eligen el camino de la muerte con sus propias manos, lastiman a los suyos, los humillan. SU rivalidad es tan grotesca que simplemente se les conocen como animales. Los humanos, incluso siendo así; son tan amables con sus allegados. Las personas que desconocen el como dar el amor a su hijo, eran mas lamentables. La vida de los humanos son más cortas, viven y mueren para el fin de aprender lo que es "vivir."
En el mundo humano siempre existe un dios por religión, el más conocido es el dios "Irius" es el dios encargado de enlazar el destino a otro individuo, así siendo conocido esa unión como: "El hilo rojo." El dios se encarga de unir a los individuos, Y de volverse a reencontrar.
Un ángel descendió del cielo; el propósito de aprender de la vida humana, los ángeles son seres que no pueden sentir odio o la preferencia a algo, simplemente se les conocía por no tener las mismas emociones humanas. Cuándo el ángel se acerco a la tierra las emociones humanas fueron dadas, así dejando el camino para el pecado. Un ángel con destino escrito, se transformo en un ser humano, un humano que tan pronto nació, se le asigno su compañero de vida, y un final, quien el mismo escribió con sus manos, un final que el decidió por cuenta propia.
Gi-Hun busca acabar con los Juegos, pero no sabe que In-Ho, el hombre tras la máscara, arriesga todo para protegerlo. Entre la tensión de los retos y las miradas, ambos se acercan peligrosamente, atrapados entre el deseo, los secretos y un sentimiento que podría destruirlos.