"... algún p*to loco está en la puerta de mi casa otra vez." Mi casa es una joyería, pero alguien sigue trayendo gente herida a mi puerta. Eran tan molestos que los trataba mientras los insultaba. Algunos desearían que me llevara mejor con ellos. "¿No salvaste al líder de una banda de asesinos la última vez?" "Era una mujer." "Oh, ¿y qué hay del cruel prestamista que posee ese lugar que vale un billón de marcos en la Segunda Avenida?" "También una mujer." "¿Y qué hay de la persona que te trajo hasta la puerta de tu casa y se fue en un carruaje noble?" "También una mujercita." Y entonces, llegó la sexta persona. Esta era la primera vez que venía un hombre y por encima, uno guapo. "Quítate eso." "¿Cómo? ¿Qué? ¿QUÉ? Oh... oh, te referías a mis gafas." Este hombre era el villano final de la novela y tenía una personalidad completamente distinta por el día y por la noche. Durante el día, era simplemente un joven inocente e ingenuo. Pero por la noche... "¿Por qué? Me pediste que me lo quitara. ¿Qué debería de quitarme esta vez?"