Jimin estaba esposado de las manos con unas pinzas en sus botoncitos, lloriqueando y balbuceando cosas poco entendibles mientras imploraba correrse, pero ¿cómo llegó a esto? Bien, todo es por culpa de papi, es su culpa por tener esos musculos que lo distraen de la realidad, y ni hablar de sus enormes pectorales. . . . . Contenido adultoAll Rights Reserved
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