❝Pienso que cuando todo se ha terminado, todo vuelve en flashes, ¿sabes?
Es como un caleidoscopio de recuerdos. Simplemente vuelve todo, pero él nunca lo hace.
Creo que una parte de mí supo en el momento en que le vi que esto pasaría. No es algo que dijera, o algo que hiciera.
Era la sensación que le acompañaba, y, la cosa más loca es que no sé si alguna vez me volveré a sentir así. Pero no sé si debería.
Sabía que su mundo se movía demasiado rápido, y quemaba demasiado, pero simplemente pensé, ¿cómo puede el diablo empujarte a alguien que se parece... tanto a un ángel cuando te sonríe? Quizás él lo sabía cuándo me vio.
Supongo que simplemente perdí el equilibrio.
Creo que la peor parte de todo no fuer perderle a él, fue perderme a mí misma.❞
Las votaciones del año 2036 son algo que no me emociona, ya que los candidatos, a mi parecer, no valen la pena, en especial Alejandro Villanueva, aquel chico que se burlaba de mí por mi sobrepeso y al que ahuyenté cuando decidí defenderme. Mi encuentro con él y mi comentario imprudente en la fila para votar es el inicio de una propuesta que no puedo rechazar, así como tampoco puedo negar la profunda atracción y el inmenso deseo entre los dos.
De la noche a la mañana me he vuelto la futura dama y también he descubierto que soy la obsesión del presidente.