Ellie Snow aprendió algo en los años que pasó sola en el orfanato, nadie merece creer que no es suficiente. A ella la hicieron sentir lo peor de lo peor y jamás dejaría que alguien volviera a sentirse igual. Es por eso que cuando a los 11 años recibió su carta de Hogwarts se propuso hacer a todos en su nuevo mundo felices. Incluso al más infeliz de todos, lo haría ver lo perfecto que es... Para eso eran sus cartas, sus amadas cartas... Cada semana escogía a un grupo de afortunados infelices entre los cientos de personas en Hogwarts y escribía en una carta todo lo bueno que había en ese ser. Ella les daba la felicidad de ser vistos con ojos de amor.