Katsuki nunca fue bueno con los sentimientos, mucho menos consolando a las personas. Es por eso que, cuando un Deku borracho se sienta en su regazo en medio de la fiesta para llorar, no sabe qué hacer. Menos cuando este está llorando por su culpa, por algo que ni siquiera sabía que había hecho. -Yo antes era tu mundo, y ahora... Sé que nos llevamos mejor pero no es lo mismo y, y, te veo con tus nuevos amigos, y... y siento que perdí mi lugar. El lugar al que tanto me costó llegar...