Una vez lo vi, él entró a un negocio de chocolates en la que estaba con mis mejores amigas en Inglaterra, era LA salida lejos de nuestros papás, yo tenía tan solo quince años cuando sentí algo muy fuerte al verlo, angustia porque no lo iba a ver nunca más, desesperación por no estar en su vida, sentí que lo conocía de otra vida.
Él pidió algo para llevar, estaba con sus amigos, ellos hablaban entre ellos animadamente, antes de irse el chico y yo cruzamos miradas, duró cinco segundos pero tan solo eso me fue suficiente para saber que era mi alma gemela.
Fui cobarde, tímida, no fui tras de él ni lo invité a salir, ni sabía que lengua hablaba, simplemente lo deje ir.
Un Viaje de Pata y Corazón es un canto de vida a través de la más absurda conversación entre una persona y sus mascotas. Es una invitación a ver las pérdidas y el dolor, no como un fin, sino como un proceso de transformación y el inicio de nuevas aventuras. La narrativa explora las profundidades del alma humana, revelando la sabiduría oculta en los momentos más oscuros y encontrando consuelo en las lecciones inesperadas que nos brindan nuestros compañeros animales. Con humor y ternura, la historia nos guía hacia una comprensión más profunda de nosotros mismos y de la vida, recordándonos que, incluso en medio de la adversidad, siempre hay lugar para el crecimiento y la esperanza.