Sergio, con esfuerzo se ha hecho un hueco en el mundo de la docencia. Su nombre, empieza poco a poco a sonar en el mundo educativo, por su metodología y propuestas de enseñanza acordes a los intereses de sus alumnos. Profesor de primaria, secundaria, jefe de estudios y maestro más que persona.
Raquel se ha convertido a su vez, en una pieza relevante en el cuerpo de policía. Una de las mejores y más demandadas inspectoras con la que por suerte, ahora cuenta Madrid.
Lo que nadie se imagina es la doble vida a la que debe enfrentarse cada día. Y es que ¿cómo pensar que la persona más empática, amable, buena colega, profesional e impecable en su trabajo, tenga que aguantar a alguien como el que resulta ser su pareja Alberto?
Posiblemente ni la misma Raquel lo pensaría, pudiendo verlo desde fuera. Sin embargo, ella sigue tragando y aguantando esa vida. Esa a la que decide poner un alto, sólo cuándo el peligro se extrapola, al motivo por el que seguía aguantando.
Pero, ¿será tan sencillo para una persona en su situación cómo lo hace ver la sociedad en estos casos?
Un año de excedencia, un viaje hacia ninguna parte, el pasado viajando a su presente y un cúmulo de circunstancias casuales empezarán a darle respuestas en breves.
Las votaciones del año 2036 son algo que no me emociona, ya que los candidatos, a mi parecer, no valen la pena, en especial Alejandro Villanueva, aquel chico que se burlaba de mí por mi sobrepeso y al que ahuyenté cuando decidí defenderme. Mi encuentro con él y mi comentario imprudente en la fila para votar es el inicio de una propuesta que no puedo rechazar, así como tampoco puedo negar la profunda atracción y el inmenso deseo entre los dos.
De la noche a la mañana me he vuelto la futura dama y también he descubierto que soy la obsesión del presidente.