Atardecer en nuestra ciudad

Hay personas que son como los atardeceres. Eso asegura Samantha de Flavio, que es como un atardecer, que ilumina, que embellece, que abraza, que ensimisma, que alucina... y que se va. Porque, aunque quisiera lo contrario, ese pequeño espectáculo natural no es eterno. ¿Será eso, al final, lo que lo diferencia de Flavio?
Y París tan solo será el sustento de lo que nacerá entre ellos: del atardecer más espectacular que ha tenido lugar ante sus ojos, ante sus corazones.
Atardece en París, en su ciudad, y no han podido hacer nada por detenerlo.