La muerte de Bella causó un gran dolor en su esposo y familia. Tras su muerte solo pudo pedir a su amigo Jacob cuidar de su hija y Edward. Él aceptó sin tener en cuanta que aquello iba a ocasionar que tuviera un gran peso sobre sus hombros. Ahora sin su preciada amiga al lado, deberá cuidar de una bebé semi inmortal y un vampiro ahogado en dolor. Sin saber que el tiempo haría de ellos la familia que Bella no pudo formar.