Ser heredero a no solamente una fortuna, sino a un imperio, diciéndolo en palabras simples era casi imposible. Él lo sabía, y no solo eso, era el segundo en la lista para recibir la corona, y por supuesto no era de su agrado. Más inteligente, más astuto y mucho más cuerdo; el segundo hijo del temido gran jefe de la mafia, estaba dispuesto a sacrificarlo todo por obtener dicho título... estaba dispuesto a todo por obtener el poder por encima de su propio hermano. Ignorando su anhelo y desesperación por encontrar lo que para muchos era el amor. Ocultando su deseo y ansia por descubrir cuán grande era el mundo fuera de las rejas doradas que lo apresaban. Estaba claro que era un ser maligno; no solo por su apariencia cautivadora, sino también por sus pensamientos lujuriosos, sádicos y enfermizos. Provocaba que las personas temblaran con su sola presencia, hacía que su búsqueda por algo que se decía era imposible de encontrar, fuera un mártir. ¿Pero... realmente era imposible? ¿Aquel relato al final era solo eso, una leyenda? Su gran anhelo por encontrarlo lo tenía tan aferrado a la sola idea surgida de un escrito antiguo que, haciendo caso omiso a lo que la propia naturaleza le dictaba; se aventuró en la búsqueda por lo que él consideraba su mayor tesoro, por lo que consideraba seria esa muestra de un corazón que jamás se sintió capaz de poseer. Se adentró a la búsqueda de lo imposible... a la búsqueda de su propia rosa negra.
1 part