Amor. Se podría decir que Eva, al tener este sentimiento más que presente dentro de su asfixiante y aislada vida, se siente la persona con más conocimientos sobre este y tiene la moral suficiente como para ayudar a su entorno a vivirlo y no morir en el intento con el pequeño plus de que ella jura no querer experimentar nada parecido a un romance o algún derivado en lo que le quede de vida. Lo cómico de todo esto es como entrará en el zapato de la pobre chica una enorme e impertinente piedra que no parará hasta conseguir que Eva abra los muros de su mente para dejar entrar nuevas ideas distintas a las suyas y le de la razón de una vez por todas.
1 part