Si el insomnio fuera dinero definitivamente Oliver Brent sería millonario. Las cosas no fueron lo mismo, no desde del accidente, pero por lo visto tampoco será igual después del verano en las Amapolas, ¿Dónde se había ido esa presión en el pecho?, ¿Dónde había quedado la angustia? Tal vez simplemente...¿estaba distraído por esos dos ojos marrones?, o solo era que Camelia Vera se sentía como un rayo de sol en un día frío.