renunciar a su familia es el sacrificio que el avatar siempre debe hacer. se suponía que nunca debían enterarse de su parentesco, sin embargo, ya parecían un par de hermanos antes de saber que lo eran en realidad, cuando descubren que Aang es el avatar, él y Kiki, su mejor amiga, escuchan una conversación entre los monjes que les revela algo que en el fondo ya sabían. abrumado por su gran responsabilidad, el avatar decide huir junto con su recién descubierta pero no desconocida hermana.