Juego de mentiras

Hemos pasado años mirando al cielo, estudiando los agujeros negros, imaginado un nuevo mundo, soñando con multiversos en una galaxia lejana, cuando la respuesta siempre ha estado aquí- dijo señalando su cabeza- en nuestro cerebro. Nuestro cerebro es quizá, algo más complejo que el universo. Y es subestimado, es subestimado el poder que tiene. El cerebro ha sido capaz de construir realidades que solo existían en nuestro cabeza. Se imaginan el poder que tendría entrelazar dos órganos de esta magnitud. Esta pequeña pieza- dijo mostrando algo que se asemejaba mucho a una pluma de guitarra. -Puede lograr entrelazar este órgano de gran vitalidad. En el primer estudio logramos conectar el cerebro de una persona viva con el cerebro de alguien que había fallecido. Estos dos cerebros crear una realidad nueva, ambos cerebros recibían estimulación del otro. Es como si pudieras volver a hablar con alguien que amabas. No es una imagen de una computadora, es su cerebro, teniendo las mismas reacciones que hubiese tenido si estuviera viva y en realidad podríamos definir que sigue viva. La diferencia es que no hay un cuerpo tangible. ¿Por qué tendríamos que despedirnos de nuestros seres queridos? ¿por qué tendríamos que sufrir? ¿cómo resolver dudas si esa persona ya no está? ¿se imaginan la cantidad de crímenes resueltos? Este es el inicio de la creación de nuevas realidades.