Científicamente hablando, sabemos que, mediante el planteamiento de la teoría "La evolución de las especies" propuesta por el naturalista británico Charles Darwin, toda especie de ser vivo, con el tiempo y muchos otros factores en su alrededor, cambian adaptándose a su entorno.
Con la misma teoría, tambien sabemos que las especies nuevas provienen de especies preexistentes.
Pero. ¿Qué pasaría si millones de años de evolución, células y experiencias preexistidas, se acumularan en una sola célula, y, por consiguiente, un solo ser vivo, especialmente, un humano? Que una diminuta célula madre, diferente a todas las demás, fuera pasando de cuerpo en cuerpo tomando a lo largo de todos esos años toda la información posible y la depositara en un solo cuerpo. ¿Explotaría? ¿Su cerebro se derretiría? ¿No sobreviviría, verdad? ¿Si quiera nacería?
Pero claro, pensar de esa forma le daría la contraria totalmente al muy reconocido difunto Charles Darwin. Ya que la especie no se adaptó.
¿¡Pero que cosas dices!? ¡Eso esta totalmente fuera de las manos del muy distinguido naturalista! ¡Después de todo, tomaría muchos años la adaptación/evolución antes mencionada!
Pero...Dentro del cuerpo de ese humano...Tambien estarían todos esos años antes mencionados, ¿No..?
Una historia que abarca temas reales, lógicos y posibles; Pero sin olvidar la ficción, la magia, la naturaleza y la esperanza.