Ella odia su vida.
No se siente comprendida por sus amigos, bueno, llamarle amigos a eso sería demasiado.
Sus amigos son unos capullos integrales, son superficiales y nunca se han preocupado verdaderamente por ella.
No ha vuelto a ser feliz desde que su padre les abandonó a su madre, su hermano y a ella.
Le quería tanto que no se atreve a confiar en nadie.
Pero busca una cosa, amor, pero no alguien que la quiera locamente y la deje tirada en cuanto se canse de ella. Nora quiere algo más, quiere que la quieran y que se queden con ella sin acobardarse ante cada bache que haya en su relación.
Piensa que nunca va a encontrar un amor así, pero... ¿Lo hará?
Freen era una omega bastante rara para la personas aquellas decían que era un poco más alta para ser una omega otros que podría dar miedo si te miraba y algunas personas solo quedaban enamorada de verla aunque para Freen todo era normal pues siempre era amable y nunca se enojaba atenta con sus seres queridos era la chica perfecta como sus padres solían decir.
Becky una pequeña omega tan hermosa como la primera nevada era una chica responsable y cuidadosa con todo lo que hacía vive esperando a que aquella omega aparezca una vez más a su vida pues recuerda que alguien la salvó cuando era pequeña más no recuerda su rostro así que vive con la ilusión de que algún día aparecerá.
Pero ¿Qué pasaría si la persona que espera aparece en último año de universidad? ¿La reconocerá?