Podría elevar su ego el saber que si fue mi todo, ¿Serian mis sentimientos importantes si quiera?, no lo creo, para él no.
Quizás sea un típico cliché de desamores primerizos, tal vez ni si quiera exista esa ya tan mencionada cuarta pared, puede que sean mis recuerdos y palabras las plasmadas intentando olvidarlo, añoro ese día que lo vuelva a ver, a pesar que sé, que me despedí para siempre.
Esto es para ti..., nunca me olvides, Aunque quizás ya lo hiciste.
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No se aceptan COPIAS ni ADAPTACIONES gracias, respeten a su creatividad y a mi originalidad, sin mas que decir.
Disfruta tu lectura.
Las votaciones del año 2036 son algo que no me emociona, ya que los candidatos, a mi parecer, no valen la pena, en especial Alejandro Villanueva, aquel chico que se burlaba de mí por mi sobrepeso y al que ahuyenté cuando decidí defenderme. Mi encuentro con él y mi comentario imprudente en la fila para votar es el inicio de una propuesta que no puedo rechazar, así como tampoco puedo negar la profunda atracción y el inmenso deseo entre los dos.
De la noche a la mañana me he vuelto la futura dama y también he descubierto que soy la obsesión del presidente.