Prólogo Desaparecidas... Eso era lo unico que sabia de ellas. Que se habian esfumado de la nada, sin rastros, ni pistas. Desde que tengo memoria mamá me enseñó a descifrar acertijos, siempre fui observadora y muy detallista cuando se trata de un caso policial, soy fan de ellos. Gracias a mi inteligencia desarrollada en esto ayude a la policia desde pequeña a resolver todo tipo de problemas menores, sin ver el peligro, solo me contaban sucesos para que los uniera y encontrara la solución, al principio era solo un juego. Pero un día me presentaron ese caso, el que me rompio en dos, el unico que nunca pude completar, el que no entiendo y no logré entrelazar nunca nada. La desaparición de mi madre y mi hermana pequeña... Los crímenes nunca dejaron de ser un juego, pero este era uno muy peligroso.